Elvis estuvo a punto de llorar cuando no le dieron una placa federal de narcótico

Elvis estuvo a punto de llorar cuando no le dieron una placa federal de narcóticos

Elvis Presley, el legendario Rey del Rock and Roll, no sólo era conocido por su música y sus actuaciones icónicas, sino también por su colección única de insignias de las fuerzas del orden. Entre su extensa colección, Elvis tenía la intención de obtener una insignia federal de narcóticos, creyendo que sería la última adición a su surtido. Sin embargo, cuando su solicitud fue denegada, quedó desolado y al borde de las lágrimas. Profundicemos en la historia de Elvis en su búsqueda de la escurridiza placa y la montaña rusa emocional que siguió.

El sueño de un coleccionista

En 1970, Elvis Presley viajó a Washington D.C. con un único objetivo: conseguir una placa de la Oficina de Estupefacientes y Drogas Peligrosas. Como ávido coleccionista de insignias de las fuerzas del orden, Elvis creía que obtener esta insignia no sólo sería un preciado complemento para su colección, sino que también le otorgaría una nueva sensación de autoridad. Esperaba que la insignia le permitiera llevar consigo drogas y armas prescritas, incluso en viajes internacionales.

Comienza la búsqueda

A su llegada a Washington, Elvis no perdió tiempo en dar a conocer sus intenciones. Entregó personalmente una nota en la Casa Blanca en la que expresaba su deseo de reunirse con el Presidente Richard Nixon. Posteriormente, se reunió con el Subdirector de Estupefacientes, John Finlator, para solicitar formalmente una placa a la Oficina de Estupefacientes y Drogas Peligrosas. La pasión de Elvis por las insignias se debía a su fascinación por su poder simbólico, y la insignia de la Oficina Federal de Estupefacientes, en particular, le atraía especialmente.

Negación devastadora

Priscilla Presley, ex esposa de Elvis, arrojó luz sobre el impacto emocional de la denegación de la insignia en su libro “Elvis y yo”. Reveló que la denegación dejó a Elvis al borde de las lágrimas, ya que estaba realmente interesado en obtener la placa. Jerry Schilling, un estrecho colaborador de Elvis, fue testigo directo de la angustia emocional del cantante y quedó sorprendido por la profundidad de su reacción. La decepción de Elvis se debía a la creencia de que la placa le otorgaría una gran autoridad y elevaría su estatus entre las fuerzas del orden y su círculo íntimo.

Esperanza renovada

A pesar del revés inicial, el ánimo de Elvis se levantó cuando recibió la noticia de que el Presidente Nixon había accedido a reunirse con él. Durante la reunión, Elvis destacó su capacidad para conectar con la gente y expresó su deseo de combatir el consumo de drogas, especialmente entre los jóvenes. Veía la placa de narcóticos como una herramienta para impulsar sus esfuerzos en este sentido. En su carta al Presidente, Elvis había mencionado explícitamente su deseo de obtener las credenciales de agente federal.

Una reunión memorable

La reunión de Elvis con el Presidente Nixon resultó ser una ocasión memorable. Durante su conversación, Elvis reiteró su deseo de obtener la codiciada insignia y, para su deleite, Nixon accedió a su petición. En un gesto inesperado y espontáneo, Elvis rodeó al Presidente con su brazo izquierdo y le abrazó. El encuentro marcó un punto de inflexión para Elvis, que se sintió eufórico y satisfecho.

La insignia decorativa

Aunque Elvis había obtenido por fin la insignia que tanto anhelaba, la realidad no estaba a la altura de sus expectativas. El distintivo federal de estupefacientes era puramente honorífico y no tenía ningún poder o autoridad legal real. No otorgaba a Elvis el derecho a llevar drogas o armas, como él esperaba. A pesar de ello, Elvis seguía contento con su adquisición. El agente del Servicio Secreto Clint Hill aclaró que Elvis no tenía poder de arresto ni autoridad legal alguna, pero que la insignia le proporcionaba una sensación de alegría y satisfacción.

Un Elvis diferente

Cuando Elvis abandonó el Despacho Oval, se había producido una transformación. La angustia emocional que había experimentado anteriormente fue sustituida por una sonrisa radiante. Priscilla Presley observó este cambio de actitud y se dio cuenta de que Elvis había salido de la reunión como una persona diferente. La placa se había convertido en un preciado complemento de su colección, simbolizando un hito en su fascinación por las placas de las fuerzas del orden.
En conclusión, la búsqueda por parte de Elvis Presley de una placa federal de narcóticos fue un testimonio de su pasión por coleccionar recuerdos de las fuerzas del orden. Aunque la placa no le otorgaba la autoridad que esperaba, tenía un inmenso valor sentimental para él. El viaje de Elvis para conseguir la placa muestra su determinación y revela un aspecto menos conocido de la vida del icónico músico.

Preguntas y respuestas

¿Por qué quería Elvis Presley una placa federal de Narcóticos?

Elvis Presley era un ávido coleccionista de insignias de las fuerzas del orden, y creía que la obtención de una insignia Federal de Narcóticos sería la cúspide de su colección. Para él, la insignia era un símbolo de máximo poder y autoridad que le otorgaba el derecho a portar drogas y armas prescritas.

¿Se reunió Elvis con el Presidente Richard Nixon para solicitar la insignia?

Sí, Elvis entregó personalmente una nota en la Casa Blanca solicitando una reunión con el Presidente Nixon. Expresó su deseo de obtener las credenciales de agente federal y habló de sus esfuerzos por combatir el consumo de drogas entre los jóvenes. El Presidente Nixon accedió a reunirse con Elvis, y durante su encuentro, Elvis mencionó su deseo de obtener la placa de narcóticos.

¿Pudo Elvis obtener la placa federal de narcóticos?



Sí, Elvis obtuvo finalmente la insignia que había solicitado. El Presidente Nixon accedió a su petición durante la reunión y Elvis abandonó el Despacho Oval con la insignia honorífica en su poder.

¿Concedía la insignia federal de narcóticos a Elvis algún poder o autoridad especial?

No, la insignia era puramente decorativa y no otorgaba a Elvis ningún poder o autoridad legal. A pesar de su creencia de que la insignia le otorgaría ciertos privilegios, como portar drogas y armas, no tenía ningún significado legal real.

¿Cómo reaccionó Elvis cuando le denegaron la placa?

Elvis se sintió desolado y estuvo a punto de romper a llorar cuando se enteró de que le habían denegado la solicitud de la placa federal de narcóticos. La denegación le afectó emocionalmente, ya que había dado mucha importancia a la obtención de la placa.

¿Coleccionaba Elvis otros tipos de insignias?

Sí, Elvis coleccionaba diversas insignias de las fuerzas del orden, como las de detective, policía y sheriff. La insignia de Narcóticos Federales le fascinaba especialmente, ya que representaba la cúspide del poder y la autoridad en su colección.

¿Qué significó para Elvis su encuentro con el Presidente Nixon?



El encuentro de Elvis con el Presidente Nixon marcó un punto de inflexión para él. Le proporcionó una sensación de alegría y satisfacción, ya que pudo obtener la insignia que había deseado. La reunión también permitió a Elvis hablar de su preocupación por el consumo de drogas y expresar su deseo de influir positivamente en ese ámbito.