Elvis Presley dio a su amigo un hogar por primera vez

La generosidad de Elvis Presley: La historia de cómo le dio un hogar a su amigo

Elvis Presley, el emblemático Rey del Rock and Roll, no sólo era conocido por su increíble música y su carismática personalidad, sino también por su generosidad con sus amigos y su entorno. Uno de los actos de bondad más notables es cuando Elvis le regaló una casa a su amigo de toda la vida, Jerry Schilling. Profundicemos en la conmovedora historia que se esconde tras este extraordinario gesto.

Una amistad para toda la vida

La amistad entre Elvis y Jerry Schilling se remonta a su infancia. Con el paso de los años, su vínculo se estrechó y Schilling se convirtió en parte integrante del séquito de Elvis. Tras el divorcio de Elvis, Schilling se trasladó a su casa de Beverly Hills, compartiendo una estrecha convivencia con la leyenda de la música. Fue durante esta época cuando Schilling empezó a salir con Myrna Smith, una de las coristas de Elvis, lo que supuso un reto debido a la naturaleza interracial de su relación.

El apoyo inquebrantable de Elvis

A pesar de las preocupaciones, Elvis insistió en que Schilling se quedara en la casa, demostrando así su aceptación y apoyo a su relación. Sin embargo, Schilling aspiraba a tener su propia casa. Cuando encontró una casa que deseaba pero que no podía permitirse, Elvis actuó de inmediato para conseguírsela a su amigo.

Una llamada telefónica en mitad de la noche

Elvis se puso en contacto con Rick Husky, el escritor propietario de la casa, a las tres de la madrugada. Decidido a ayudar a Schilling, se ofreció a extenderle un cheque en el acto. El compromiso de Elvis con la felicidad de su amigo era evidente, ya que quería ser él quien proporcionara a Schilling un verdadero hogar. El impacto emocional de este gesto fue profundo, teniendo en cuenta que Schilling nunca había tenido un hogar estable, ya que perdió a su madre muy joven.

Los extravagantes regalos de Elvis

Elvis Presley era conocido por sus generosos regalos, y proporcionar un hogar a su amigo era sólo un ejemplo de su extraordinaria generosidad. Cuando compró un rancho para él y su entonces esposa Priscilla Presley, también compró remolques y camiones para que cada miembro de su séquito pudiera alojarse en la propiedad. Además, Elvis regaló caballos a sus amigos y a sus esposas, lo que permitió a todos disfrutar juntos de la equitación.

Un jefe exigente con un corazón de oro

Aunque Elvis podía ser un jefe exigente, siempre iba más allá por sus amigos y su entorno. Priscilla Presley, su ex esposa, reconoció su inquebrantable apoyo y generosidad en su libro “Elvis y yo”. Elvis prestaba grandes cantidades de dinero a quienes lo necesitaban, sin esperar que se lo devolvieran. Hacía regalos caros a sus amigos, como televisores, cheques extra y coches de lujo. Su capacidad para sorprender a los demás con regalos bien pensados le proporcionaba una inmensa alegría.

El valor personal de hacer regalos

Elvis se enorgullecía de la felicidad que sus regalos proporcionaban a los demás. Poner una sonrisa en la cara de alguien era su objetivo final, y le dolía profundamente que un regalo no fuera aceptado. Esto se debía a sus humildes orígenes, ya que quería alegrar la vida de los que le rodeaban. Desde criadas y amas de llaves hasta enfermeras y amigos, la generosidad de Elvis no tenía límites.

El legado de la bondad de Elvis

El acto de Elvis Presley de dar una casa a su amigo es un ejemplo del profundo impacto que tuvo en las vidas de sus allegados. Su generosidad y consideración siguen inspirando a otras personas. La historia de Elvis nos recuerda el poder de la bondad y la importancia de apoyar y animar a quienes nos rodean.
En conclusión, el regalo de Elvis Presley de una casa a su amigo Jerry Schilling es un testimonio de la inmensa generosidad y la naturaleza bondadosa del Rey. Su capacidad para proporcionar estabilidad y felicidad a sus seres queridos es un brillante ejemplo de su carácter. El legado de Elvis no sólo perdura a través de su música, sino también de las innumerables vidas que tocó con sus actos de bondad.

Preguntas y respuestas

¿Cómo se hicieron amigos Elvis Presley y Jerry Schilling?

Elvis y Jerry Schilling se hicieron amigos durante su infancia y su vínculo se estrechó con el paso de los años. Con el tiempo, Schilling se convirtió en un miembro clave del séquito de Elvis.

¿Por qué Jerry Schilling se mudó a la casa de Elvis en Beverly Hills?

Tras el divorcio de Elvis, Jerry Schilling se mudó a la casa de Elvis en Beverly Hills para vivir cerca de la leyenda de la música. Esto les permitió pasar más tiempo juntos y fortalecer aún más su amistad.

¿Qué motivó a Elvis a darle una casa a Jerry Schilling?



Elvis quería proporcionar a Jerry Schilling, su viejo amigo, un hogar estable y permanente. Se enteró de que Schilling deseaba una casa propia pero no podía permitírsela, así que Elvis se encargó de conseguirle un hogar.

¿Cómo se aseguró Elvis de que Jerry Schilling consiguiera la casa deseada?

Cuando Jerry Schilling encontró una casa que quería pero que no podía pagar, Elvis se puso en contacto personalmente con el propietario, Rick Husky, en mitad de la noche. Elvis se ofreció a extender un cheque en el acto, asegurándose de que Schilling pudiera adquirir la casa que deseaba.

¿Hacía Elvis con frecuencia regalos extravagantes a sus amigos y a su séquito?

Sí, Elvis Presley era conocido por sus extravagantes regalos. No sólo proporcionó un hogar a Jerry Schilling, sino que también compró remolques, camiones y caballos para su séquito, lo que les permitió quedarse y disfrutar juntos de actividades recreativas.

¿Se le devolvió a Elvis el dinero que prestó a sus amigos?

No, Elvis rara vez esperaba que le devolvieran el dinero que prestaba a sus amigos. Prestaba generosamente ayuda económica sin esperar que se la devolvieran.

¿Cuál era la motivación de la generosidad de Elvis?



La generosidad de Elvis provenía de sus humildes orígenes y del deseo de llevar alegría y felicidad a los demás. Se enorgullecía de sorprender a sus amigos y seres queridos con regalos caros y bien pensados, ya que eso les alegraba la vida y a él le hacía feliz a cambio.