Por qué Dolly Parton y sus hermanos siempre mentían si sus zapatos nuevos no les quedaban bien

Por qué Dolly Parton y sus hermanos siempre mentían si sus zapatos nuevos no les quedaban bien

Dolly Parton, el icono de la música country, ha compartido una conmovedora historia de su infancia sobre por qué ella y sus hermanos siempre mentían si no les entraban los zapatos nuevos. En un mundo en el que se valora la honestidad, esta singular tradición familiar arroja luz sobre el ingenio y la determinación de la familia Parton. Profundicemos en los fascinantes detalles de esta historia.

Cómo compraba Robert Lee los zapatos de sus hijos

El transporte era un reto importante para la familia Parton a la hora de comprar zapatos nuevos para sus hijos. El padre de Dolly Parton, Robert Lee Parton, hacía el viaje a la ciudad aproximadamente una vez cada seis semanas. Sin embargo, llevar a los doce niños era poco práctico. En su lugar, Robert ideó un ingenioso método para determinar sus tallas de zapatos.
Utilizando palos recogidos de su entorno, Robert medía los pies de sus hijos contra los palos, marcando cuidadosamente las tallas con su cuchillo. Cada palo llevaba el nombre del niño cuya talla representaba. Armado con estas medidas personalizadas, Robert se embarcaba en su viaje a la ciudad o a la tienda local.
Al llegar a la tienda, Robert introducía los palos en varios pares de zapatos hasta encontrar el que mejor se adaptaba a cada niño. Este ingenioso método le permitía asegurarse de que sus hijos tuvieran calzado adecuado para las próximas temporadas de otoño e invierno.

La inquebrantable respuesta de los niños Parton

A pesar de los esfuerzos de su padre, había ocasiones en las que los zapatos no les quedaban perfectos. Sin embargo, en lugar de expresar su descontento, los niños Parton elegían otro camino. Mentían y le decían a su padre que los zapatos les quedaban perfectos, sin tener en cuenta el ajuste real.
El motivo de este engaño era la dificultad de devolver los zapatos para cambiarlos. Esperar otras seis semanas hasta el próximo viaje de su padre a la ciudad parecía mucho menos atractivo para los impacientes niños Parton. Preferían conformarse con unos zapatos que no les quedaran bien o emplear soluciones creativas, como estirarlos o llevar calcetines de más.

La filosofía de los montañeses

La creencia de que a los niños “les deben quedar grandes” las cosas prevalecía entre los montañeses, incluido el padre de Dolly Parton. Esta filosofía influyó en su decisión de aceptar zapatos ligeramente demasiado grandes en lugar de demasiado pequeños. La comodidad de llevar zapatos de una talla más pesaba más que la incomodidad de llevar zapatos demasiado apretados.
Los niños Parton se entusiasmaban cuando recibían zapatos nuevos y esperaban con impaciencia el regreso de su padre. Los zapatos, a menudo brogans, un calzado de piel de caña alta, resistente y duradero, simbolizaban un nuevo comienzo y la oportunidad de llevarlos con orgullo, aunque no fueran de la talla perfecta.

Una tradición anual

El acontecimiento anual de recibir zapatos nuevos era un momento muy apreciado en el hogar de los Parton. Cuando los niños esperaban la llegada de su padre, se reunían en el patio, ansiosos por verle por primera vez de regreso de su viaje. Los zapatos, atados por los cordones y colgados del cuello del caballo, eran un símbolo de expectación y entusiasmo.
El padre de Dolly Parton tenía un método sistemático para distribuir los zapatos. Sacaba el palito de cada par, leía el nombre escrito en él y entregaba el par correspondiente al niño al que pertenecía. Una vez atados los zapatos, los niños se paseaban alegremente por la casa, disfrutando de este ritual anual que les proporcionaba emoción y consuelo.

Zapatos nuevos y dignidad

Aunque los zapatos les quedaran un poco grandes, Dolly Parton y sus hermanos los consideraban una fuente de dignidad. Llevar zapatos nuevos, independientemente de la talla, les permitía ir a la escuela con orgullo y enfrentarse al mundo con confianza. Los zapatos, independientemente de su talla, representaban el cuidado y el amor de su padre, que hacía todo lo posible por mantener a sus hijos.
Esta conmovedora historia de la infancia de Dolly Parton ejemplifica la resistencia, el ingenio y el amor que caracterizaron su educación. Muestra los profundos lazos que unían a la familia Parton y las lecciones que aprendieron sobre cómo sacar lo mejor de lo que tenían. La tradición de mentir sobre los zapatos que no le quedaban bien pone de relieve la importancia de la gratitud, la adaptabilidad y el valor de la familia para superar los retos.
Las experiencias de la infancia de Dolly Parton siguen inspirando y llegando al corazón de personas de todo el mundo. A través de su música, su filantropía y sus historias, nos recuerda el poder de la resistencia y el espíritu perdurable de la determinación.

Preguntas y respuestas

¿Por qué Dolly Parton y sus hermanos mintieron acerca de que sus zapatos nuevos no les quedaban bien?

Los niños Parton mentían sobre la falta de ajuste de sus zapatos porque preferían arreglárselas con unos zapatos que no les quedaran bien a esperar otras seis semanas hasta el próximo viaje de su padre a la ciudad para cambiarlos.

¿Cómo determinaba el padre de Dolly Parton la talla de sus zapatos?

El padre de Dolly Parton, Robert Lee Parton, utilizaba palos para medir los pies de sus hijos. Hacía muescas en los palos con su cuchillo, marcando la talla que correspondía al pie de cada niño. Este método le ayudaba a elegir la talla de zapatos adecuada durante sus viajes a la ciudad.

¿Cuál era la filosofía de aceptar zapatos un poco más grandes?

La familia Parton, influida por la filosofía de los montañeses, creía que los niños debían “crecer con” las cosas. Preferían zapatos un poco más grandes porque eran más cómodos que los zapatos demasiado pequeños.

¿Con qué frecuencia recibían los niños Parton zapatos nuevos?

Los niños Parton recibían zapatos nuevos una vez al año. Su padre hacía el viaje a la ciudad aproximadamente cada seis semanas para comprar zapatos para los doce niños, asegurándose de que tuvieran calzado para las temporadas de otoño e invierno.

¿Qué tipo de zapatos solían recibir los niños Parton?



Los niños Parton solían recibir brogans, que eran zapatos de cuero resistentes y de caña alta. Estos zapatos se elegían por su durabilidad y capacidad para soportar el estilo de vida activo y los terrenos accidentados de la región montañosa.

¿Les hacía ilusión a los niños Parton recibir zapatos nuevos?

Sí, los niños Parton esperaban con impaciencia el día del zapato nuevo. Esperaban el regreso de su padre, a menudo reunidos en el patio, emocionados por verle por primera vez y descubrir qué tipo de zapatos recibirían.

¿Qué simbolizaba para la familia Parton la tradición de recibir zapatos nuevos?

La tradición de recibir zapatos nuevos simbolizaba un nuevo comienzo y una oportunidad para que los niños Parton llevaran sus zapatos con orgullo y dignidad. Representaba el cuidado y el amor de su padre, que hacía todo lo posible por satisfacer las necesidades de sus hijos.